Obra del autor español
Juan Gris, analítica de una obra cubista sintética. El cubismo sintético encuadra mejor con Gris, para empezar porque es contemporáneo a la pintura y, además, aparece el color. Tengo que hace hincapié en el periódico, con el cubismo sintético empieza a surgir el collage como forma compositiva junto con el trazo y la pintura. Si bien, la obra no tiene collage, la aparición del periódico supone un guiño a las formas que se experimentaban por la época. Sin embargo, lo que nos hecha para atrás dentro de esta obra es que, a diferencia del cubismo sintético, supone una maraña sin orden alguno. El cubismo sintético surge con el fin de poder poner representar la realidad en un cuadro plano mediante las dos dimensiones. No usando una falsa tercera dimensión (la perspectiva que tanto nos costó conseguir durante el Renacimiento y el Barroco), sino usando distintas vistas de la composición para darnos a entender que vemos un cuerpo: los cuerpos aparecen vistos simultáneamente desde distintos puntos de vista.
Sin embargo esta situación no se da en la composición de Juan Gris, a la guitarra la vemos en un sólo plano, el periódico, la correspondencia y la mesa también. Si estuviésemos ante una obra de cubismo sintético se nos mostraría la mesa, la pata de la mesa, la guitarra, el mástil, la caja de la guitarra e incluso el barco de vela del fondo con diferentes planos de las diversas partes de los cuerpos.
La composición es por tanto difícil de encuadrar en el contexto pictórico, podemos decir de ella que pertenece al cubismo, sin embargo, dista mucho de las obras de Georges Braque como “Violín y paleta” o del “Guernica” del malagueño Pablo Picasso, es más, se diferencia mucho y sí que supone un gran avance a obras anteriores del mismo Juan Gris como “Guitarra” de 1914. Aunque como vemos, la temática de Juan Gris es muy ecléctica y siempre surge la guitarra como el elemento central de las obras.